( La Cabaña de la muerte)
Fuimos invitados por un compañero de nuestra universidad a una cabaña que tenían sus padres a las afueras de la ciudad, según nos decía él, era un lugar muy bonito y en medio de un tupido bosque, así que estábamos muy animados, íbamos dos chicos y dos chicas, estábamos en pareja, así que no solo sería un fin de semana para disfrutar de la naturaleza, sino de tres noches de romance y derroche, salíamos viernes en la tarde, algo para lo que no estábamos preparados es que para llegar al lugar había que dejar el auto, casi una hora antes de la cabaña y caminar por un pequeño camino en medio del bosque, claro que el lugar era hermoso, el bosque, el canto de las aves, un pequeño arroyo que se debía cruzar para llegar a la cabaña, aunque cansados estábamos felices, nos esperaba un gran fin de semana, la cabaña aunque pequeña era muy acogedora, tenía tres habitaciones, así que podríamos estar a solas con nuestra pareja.
Comimos y jugamos cartas un rato, pero pronto nos fuimos a nuestras habitaciones, queríamos estar a solas con nuestras chicas, las habitaciones iban en fila, así que las parejas tomamos la de cada lado, dejando una de por medio para que los unos no escucharan a los otros, por dar un poco de privacidad, antes de que pasara cualquier cosa, escuchamos ruidos en la habitación contigua, la que se suponía dejaríamos vacía, así que me levanté y fui a decirle a mi amigo por que habían usado esa habitación, el estaba junto a la puerta, según el, al igual que yo iba a preguntarme lo mismo, así que los dos entramos a esa habitación, estaba vacía, solo la cama pero en completo orden, no podía ser, el ruido era bastante fuerte, ambos lo escuchamos, bueno los cuatro, también las chicas los escucharon ; sin saber que hacer quisimos volver a nuestras habitaciones, la puerta estaba cerrada con seguro, no podíamos salir, les gritamos a las chicas y golpeamos las paredes para que nos abrieran, pero para hacer todo más misterioso ellas no se escuchaban por ningún lado, no podía ser que hubieran salido, ya era de noche y ellas no conocían nada por allí, pasamos cosa de tres horas tratando de abrir, no es que hayamos abierto, la puerta se abrió por si sola de par en par, corrimos a las habitaciones para ver si no les había pasado nada a las chicas, ambas estaban tranquilas en sus camas, para ellas solo había pasado un par de minutos, mi amigo y yo nos miramos sorprendidos, algo no estaba bien, pero no podíamos decirles a ellas que tal vez alguien más había allí con nosotros, mi amigo me sugirió ir al auto por una arma que tenia en la guantera, era mejor estar preparados, aunque ya era de noche, era mejor tener un arma para defendernos, yo era el más atlético de los dos, me demoraría menos en ir y volver.
Desde que tomé el camino, algo estaba mal, me sentía extraño, mareado, algo que no podía ser, hasta el momento, ninguno de los cuatro había ingerido licor o cualquier otra sustancia, así que aquello no podía ser, mi mareo iba en aumento a medida que avanzaba, de seguir así, no alcanzaría a llegar al auto y menos de regresar, si lo hacía tardaría toda la noche, vi a alguien antes de llegar al arroyo, solo una sombra de pasada, algo muy extraño por allí no vivía nadie, así me lo había hecho saber mi amigo, así que decidí regresar a la cabaña, pero no había donde regresar, estaba perdido, no había ningún camino, todo eran árboles y árboles un bosque espeso y tupido, no podía saber dónde estaba ni que rumbo seguir, así que caminé sin saber a donde, creo deambule unas dos o tres horas, la verdad no sabría decir un tiempo específico , en un momento dado estoy de nuevo en la entrada de la cabaña, voy allí fatigado, cuando llego mi amigo y su chica están en la sala charlando, se veían preocupados, al ver la hora no había pasado sino algo más de una hora, ellos dijeron que mi chica se había ido a dormir, la preocupación de ellos, era porque mientras estuve fuera, ellos estaban seguros que yo había estado en la cabaña, pero no me habían visto de frente, solo de espaldas o ruidos en la casa de mis pasos, yo les aseguré que no había sido yo.
Llame aparte a mi amigo y le conté lo que a mi me había ocurrido, mi amigo me dijo que lo mejor era a primera hora irnos de allí, me confesó que su padre había comprado esa cabaña muy económica, ya que allí en la habitación del medio, la que el había evitado a propósito y no por la privacidad, había ocurrido un crimen, una pareja la había alquilado y la mujer la encontraron ahorcada, su acompañante era el principal sospechoso, pero este lo encontraron dos días después en el camino antes de llegar al pequeño arroyo, lo habían ahorcado con una cuerda, al parecer de la misma con que colgaron la chica, el crimen quedo sin resolver, pero la pareja se sigue viendo en la cabaña y en el camino o al menos se cree que son ellos, porque nunca nadie los a podido ver de frente, siempre de espaldas o cuando van de pasada.
Escuchamos a mi compañera hablar sola en la habitación, sonreía, la Conversación parecía amena, cuando llegamos allí estaba sola, al vernos como que volvió en si, me preguntó como había llegado a la puerta si yo estaba en la cama, parecía loca pensé, no supe que decirle, les pedí irnos a dormir mi amigo y yo habíamos decidido que al día siguiente nos iríamos de allí, no les diríamos a las chicas el porqué , mi amiga se empecinó que debíamos dormir en la habitación del medio, no hubo poder humano que la hiciera desistir, debí aceptar, no queríamos contarle lo ocurrido allí, eran casi las 4 am, pronto me quedé dormido, no pasó nada entre ella y yo, al rato despierto y la veo hablando en la oscuridad, con alguien que solo ella ve, se sonríe y quiere salir, la detengo, está sonámbula, al detenerla la puerta de la habitación la golpean con fuerza y un gran ventarrón se siente fuera, la acuesto en la cama, me quedo vigilándola por lo poco que falta de la noche, al día siguiente casi que las obligamos a regresar, en ambas parejas no había pasado nada, esa noche no era para eso.
Los padres de mi amigo pronto vendieron esa cabaña, por unos pocos pesos nadie la quería, mi amigo se casó con la chica que estuvo esa noche, la chica con la que yo fui, pronto se fue de la ciudad y no volví a saber nada de ella, hasta tres años después que apareció en las noticias, había ido con su novio a dicha cabaña, no sabemos los pormenores, solo lo que vimos en las noticias, una pareja había alquilado la cabaña por un fin de semana, ella la habían encontrado ahorcada en la habitación del medio y a el ahorcado a un lado del arroyo, la policía no había encontrado ningún sospechoso, ni tenían ninguna pista.
𝑫𝒆𝒓𝒆𝒄𝒉𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒂𝒖𝒕𝒐𝒓 : 𝑨𝒍𝒆𝒙 𝑴𝒐𝒓𝒂𝒍𝒆𝒙 𝑮𝒐̀𝒎𝒆𝒛.
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